Preocupación por la militarización de Río de Janeiro
La RESLAC manifiesta su preocupación por la militarización del estado de Río de Janeiro por parte del gobierno de Michel Temer. De igual forma, insta a que el Parlamento Brasileño rechace la intervención que pone en riesgo el respeto de los derechos humanos de la población.
Frente a la decisión anunciada por el gobierno federal brasileño de nombrar como interventor responsable único por la seguridad en el Estado de Rio de Janeiro, al General de Ejército, Walter Souza Braga, la Red de Sitios de Memoria Latinoamericanos y Caribeños (RESLAC) manifiesta su profunda preocupación por lo que considera un paso en dirección a la militarización de todo el aparato de seguridad del Estado.
La historia de América Latina y el Caribe ha demostrado una y otra vez que la inclusión de las fuerzas armadas en tareas de seguridad interna, ha dado lugar, en el pasado reciente, al desarrollo de dictaduras y graves violaciones a los derechos humanos; y en el presente, a crecientes denuncias por torturas, asesinatos y desapariciones cometidos por efectivos de las Fuerzas Armadas, tal como lo demuestran el caso de México, Colombia, y el llamado Triángulo Norte de Centroamérica, en donde las intervenciones militares, lejos de reducir los niveles de violencia, los han incrementado a niveles alarmantes.
Aun cuando las estrategias y tácticas de la guerra han probado reiteradamente no ser eficaces para la intervención en seguridad, según el Decreto 9.288 recientemente difundido por el gobierno de Michel Temer, el General Braga, actualmente encargado del Comando Militar del Este (que incluye tres Estados) tendrá, a partir de este momento, el comando de las fuerzas policiales (civiles y militares), las fuerzas de la Policía de Carreteras, el Cuerpo de Bomberos y todo el sistema carcelario del tercer Estado más poblado de Brasil, con 16,5 millones de habitantes.
La RESLAC manifiesta que, aunque la intervención militar en cuestiones de seguridad interna ha tenido diferentes objetivos en diferentes países de la región, un repaso de la situación sugiere que los resultados han sido negativos en múltiples aspectos: el fracaso en la solución de los problema de seguridad, el aumento de la violencia y violaciones a los derechos humanos; la desprofesionalización de las Fuerzas Armadas y su degradación institucional. De acuerdo a lo que pone en evidencia la experiencia latinoamericana y mundial, la militarización de las fuerzas policiales, al contrario de pacificar las comunidades, transformará a la población pero también a los propios militares, en su mayoría jóvenes preparados para enfrentamientos bélicos, en rehenes de una política contraria a la defensa y el respeto por los Derechos Humanos, haciendo girar la rueda de la violencia con mayor intensidad.
Como organizaciones e instituciones que trabajamos por la defensa de los derechos humanos y la democracia, los miembros de la RESLAC, integrada por 41 espacios de memoria de 12 países de América Latina y el Caribe, apelamos a que esta medida de intervención militar sea rechazada por el Parlamento Brasileño y que los esfuerzos para garantizar la seguridad de los habitantes de Rio de Janeiro sean reflejo del entendimiento entre especialistas civiles en la materia.
Comunicado en PDF: Comunicado militarización RJ
RESLAC:
Archivo Provincial de la Memoria – Argentina
Centro Cultural por la Memoria de Trelew – Argentina
Comisión de Homenaje a las Víctimas de los CCD Vesubio y Protobanco – Argentina
Museo de la Memoria de Rosario – Argentina
Parque de la Memoria – Argentina
Memoria Abierta – Argentina
Casa do Povo – Brasil
Memorial de la Resistencia – Pinacoteca del Estado de Sao Paulo – Brasil
Núcleo de Preservación de la Memoria Política – Brasil
Memorial Paine: Un lugar para la memoria – Chile
Museo de la Memoria y los Derechos Humanos – Chile
Estadio Nacional – Chile
Comité de Derechos Humanos Nido Veinte – Chile
Casa Memoria José Domingo Cañas – Fundación 1367 – Chile
Corporación Parque por la Paz Villa Grimaldi – Chile
Asociación por la Memoria y los Derechos Humanos Colonia Dignidad – Chile
Fundación de Ayuda Social de las Iglesias Cristianas -F.A.S.I.C- Chile
Centro de Memoria, Paz y Reconciliación – Colombia
Consejería de Proyectos – Colombia
Centro Nacional de Memoria Histórica – Colombia
Museo Casa Memoria de Medellín – Colombia
Red Colombiana de Lugares de Memoria – Colombia
Museo de la Palabra y la Imagen – El Salvador
Archivo Histórico de la Policía Nacional – Guatemala
Instituto Internacional de Aprendizaje para la Reconciliación Social -IIARS- Guatemala
Memorial para la Concordia – Guatemala
Centro para la Acción Legal en Derechos Humanos -CALDH- Guatemala
Dévoir de Memoire Haïti – Haití
Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas – México
Sociedad Civil Las Abejas – México
Centro de Investigaciones Históricas de los Movimientos Sociales – México
Museo de las Memorias: Dictaduras y Derechos Humanos – Paraguay
Dirección de Verdad, Justicia y Reparación – Defensoría del Pueblo – Paraguay
Asociación Paz y Esperanza – Perú
Movimiento Ciudadano Para Que No Se Repita – Perú
Asociación Caminos de la Memoria – Perú
Museo Memorial de la Resistencia Dominicana – R. Dominicana
Centro Cultural Museo de la Memoria – MUME – Uruguay
Espacio Memoria Quica Salvia (Secretaría de DDHH, Canelones) – Uruguay
Fundación Zelmar Michelini – Uruguay
Historical Memory Project (con sede en Nueva York – EEUU)