Comunicados

La RESLAC acompaña la conmemoración del 60° aniversario del Golpe de Estado en Brasil y rechaza las políticas orientadas a su negación, reivindicación y silenciamiento

La RESLAC acompaña a los sitios de memoria y a la sociedad brasileña en su conjunto en la conmemoración y repudio del 60° aniversario golpe de estado del 31 de marzo de 1964, que inició dos décadas de dictadura militar en Brasil. Al mismo tiempo, expresa su rechazo a la decisión del presidente Luiz Inacio Lula da Silva de cancelar cualquier conmemoración oficial de este aniversario, que considera contraria a los pactos internacionales y regionales de derechos humanos, así como al debido respeto a la comunidad de víctimas. Ni el negacionismo ni la reivindicación pública del Golpe del 64´ que alentó el ex presidente Jair Bolsonaro ni el silenciamiento impuesto ahora por el presidente Lula Da Silva permitirán consolidar una democracia sólida y unas fuerzas armadas comprometidas con su defensa y sostenimiento. Reivindicar y callar son decisiones ominosas que sólo contribuyen a fortalecer el autoritarismo y la repetición.


-31 de marzo de 2024-

Los 60 años del golpe de Estado abren justamente la oportunidad histórica para un repudio social y político masivo del golpismo y una fuerte reafirmación del compromiso con la democracia que debe empezar por las propias instituciones, tal como lo establece el Documento de Principios sobre Políticas Públicas de Memoria en las Américas de la CIDH, que impone a los Estados el deber de asegurar un “abordaje integral de la memoria”, como base para tramitar las graves violaciones a los derechos humanos del pasado y del presente.

La historia de nuestra región nos enseña que la defensa de la democracia y los derechos humanos en el pasado no puede ser escindida de su defensa en el presente. El intento de golpe de Estado de enero de 2023 en Brasil, orquestado por el ex presidente Jair Bolsonaro con la complicidad de sectores militares en actividad, que buscó impedir la toma de posesión del actual presidente Lula da Silva, pone en evidencia la necesidad imperiosa de consolidar una conciencia colectiva crítica respecto de la interrupción del estado de derecho en la década del sesenta. Precisamente, son los escases avances en materia de verdad, memoria y justicia en Brasil los que han favorecido el intento golpista fallido de enero pasado.

No es con menos memoria sino con más memoria, más verdad y más justicia como se podrán afrontar los desafíos del presente y el futuro. La RESLAC alienta al actual gobierno a profundizar sus políticas en esta materia, en lugar de continuar el camino de su restricción, que sólo sembrará condiciones para la repetición de las violaciones al orden constitucional y los derechos humanos.